Comprar un vehículo, sin importar que está recién salido de agencia o usado, es para algunas personas mucho más que una necesidad para su movilización, pues a veces lo adquieren para darse un ‘gustico’, transformándolo, y termina siendo una extravagancia muy costosa.

Esas modificaciones van desde el aspecto externo e interno (tuning), hasta el cambio de motor para hacerlo más rápido y competir en carreras (racing), todo depende del dinero con el que se cuente para hacer las variaciones. En Cúcuta y el área metropolitana podemos ver muchos de esos automotores transformados, algunos de alta gama y otros de gama media.

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El pasado 3 de octubre, en la Plaza de Banderas, que está a un costado del estadio de fútbol General Santander, se pudo observar, durante el ‘Car Meet’, copa Auto Geat’, una gran cantidad de esos carros y camionetas modificados.

Lo más común y que no pasa de moda, son los cambios en el sistema de sonido de los automotores, como hoy se lo mostraremos en La Opinión.

Edwin García propietario de la marca Advance, que fabrica todo lo relacionado en audio, aseguró que diariamente modifica uno o dos vehículos en el sistema de sonido. “Hay muchos propietarios de carros o camionetas que les apasiona hacer esas variaciones”.

Lo primero que se debe tener en cuenta son los costos, pues esas transformaciones pueden variar de precios, “hay sistemas de audio sencillos, que van desde un millón de pesos, siendo algo muy simple internamente del vehículo, pero si ya se quiere para sonido externo, podría valer mínimo $10 millones”.

Muchas de esas modificaciones del sistema de sonido son sorprendentes, algunas personas lo hacen por simple gusto e impresionar, pero otras las aplican para participar en los famosos ‘Car audio’ que se están dando mes a mes en diferentes ciudades de Colombia, donde ganan trofeos y reconocimiento.

Pero esos ‘gusticos’ también pueden llegar a costar mucho más que el mismo automotor. “Pues hay sistemas de sonidos muy lujosos y que son más sofisticados, que pueden llegar a valer hasta más de $80 o $100 millones, como los tienen algunos vehículos”, contó García.

Algunos aficionados de esta modalidad manifestaron que sin importar lo que valga cada modificación, lo hacen, y, además, consideran que sus automotores son unos ‘jugueticos’ lujosos a los que deben hacerles esos cambios para que luzcan más llamativos que el resto.

“A mi carro le he invertido mucha plata, es más el sistema de sonido vale más que el propio vehículo. Menos mal que me lo tienen asegurado porque si me lo roban, me dolería mucho por todo lo que le he invertido”, señaló uno de esos tantos dueños de vehículos modificados.

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Pero para ver todos esos lujos, que a veces rozan la extravagancia, y escuchar esa música a todo volumen, a punto de romper los tímpanos, se debe ir a cada evento de ‘Car audio’ que se organiza en la ciudad y así se sabrá de qué se habla.

Clases de modificaciones

Johan Martínez es otro comerciante cucuteño que se encarga de instalarle cualquier sistema de sonido a los vehículos que le llevan. “Todo depende de lo que el cliente quiera, se le puede instalar un buen audio interno, pero si lo quiere externo ya hay que meterle muchas más cosas de calidad”.

Añadió: “lo primero que hay que tener en cuenta es qué se quiere, para el presupuesto. Pues se debe saber que para hacer una buena inversión, hay que pensar en los cambios que hay que hacerle a los carros o camionetas, porque hay que mandar hacer un mueble en madera a las medidas del vehículo, especialmente en la parte de atrás, donde van las cornetas, los bajos, los brillos y la planta, que son diferentes elementos del sistema de audio, además, hay gente que le mete luces. Todo eso cuesta”.

Eso es para quienes quieren competir en algún evento de ‘car audio’ o salir a presumir, pero si alguien busca algo muy simple, solo para tener sonido interno, “con cuatro cornetas y un equipo de sonido económico, le podría salir en menos de un millón de pesos”, sostuvo Edwin García.

Pero si buscan aumentar el sistema de sonido, “ya deben comprar un amplificador, una planta, un equipo de última generación, que le ayuda hasta controlar el aire acondicionado. Además que debe pensar en el resto de cosas. Por ejemplo, yo tengo mi carro con un buen audio y ya llevo invertido $10 millones”, explicó García.

Johan Martínez también señaló que dependiendo el sistema de sonido, también deben usar un cableado en bronce, además de unas baterías especiales de gel, que le dan energía al sistema de audio y todo esto debe ir instalado de forma independiente del sistema eléctrico del automotor, para evitar un daño.

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Cómo ganan en los ‘Car audio’

Edwin García explicó que para competir en los ‘Car audio’ y aspirar a ganar, los sistemas de sonido deben sonar sin ningún tipo de distorsión. “Los jueces se paran al frente de donde está el sonido y comienzan a escuchar, todo debe estar sonando con canciones propias, nada de compuestas y a oído, van calificando. Los que son elegidos les dan un premio y un trofeo, además, que es prestigio para quienes nos encargamos de hacer esas instalaciones”.

Agregó: “yo tengo mi carro bien arreglado porque muestro mi marca Advance, que es un muy buen sistema de sonido y es por eso que me buscan mucho. Es más, estoy tan sorprendido que a pesar de estar en pandemia y haber un recesión económica, me llegan hasta dos vehículos diariamente para que les instale buenos sistemas de audios”.

Gerardo Moros, organizador del evento que se dio el pasado 3 de octubre en la Plaza de Banderos, en Cúcuta, aseguró que ese día se dieron cita aquellos vehículos a los que les hicieron cambios en latonería, pintura, cojinería, rines, sonido, motores, entre otras cosas más.

Indicó que, “a estos eventos que organizo, viene gente de acá de Cúcuta y de otras ciudades como Medellín, Bogotá, Cali, Barranquilla, entre otras. En los ‘car audio’ se pueden ver marcas extranjeras de carros como Porche, Pontiac o Ferrari, la idea es que la gente se impresione con lo que ve”.

Pero esta fiebre de que un vehículo tenga un sonido fuerte y que tanto el reguetón, la salsa, el vallenato o la música norteña retumben y pongan a vibrar las ventanas y puertas por donde pasa, no es de ahora, pues desde hace más de 20 años se viene dando.

“Uy, esto viene desde hace mucho. Acá en Cúcuta siempre se ha visto como algunas personas le gusta invertir en esos sistemas de sonido, que a veces se convierten en extravagancias. Siempre compran plantas de sonido, parlantes, brillos, luces y mandan hacer los cajones donde van a meter todo eso, ahora es con mucha más estética, que antes”, contó uno de los tantos veteranos que son fanáticos de esos sistemas de audio.

Se arriesgan a sanciones

Pero tener ese lujoso sistema de audio en sus vehículos, les puede ocasionar una sanción económica por parte de las autoridades de tránsito.

“A veces hay policías que paran los carros que ven con un sistema de sonido porque saben que no tienen una buena visibilidad trasera, entonces eso ocasiona que nos pongan comparendo ($119.346), pero también hay uniformados que lo hacen parar a uno, solo para ver el tipo de equipo que se tiene instalado”, contó el dueño de uno de estos vehículos modificados.

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Otras de las sanciones de tránsito señala que: “utilizar radios, equipos de sonido o de amplificación a volúmenes que superen los decibeles máximos establecidos por las autoridades ambientales. De igual forma utilizar pantallas, proyectores de imagen o similares en la parte delantera de los vehículos mientras esté en movimiento”. Da para una multa de $238.692.

Pero este último comparendo es un tanto más complicado para que sea aplicado, pues las autoridades no cuentan con el aparato especializado que se usa para medir los decibeles del sistema de audio que tienen los vehículos.

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