Tras una mesa de diálogo que duró por espacio de dos horas y que se desarrolló en la comandancia de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), los taxistas pusieron fin a una jornada de protesta que paralizó la movilidad de la ciudad desde las 5:00 de la mañana y generó malestares en la ciudadanía. 

El alcalde de Cúcuta, en su aparición pública al concluir el encuentro, acompañado de sus secretarios de Gobierno y Seguridad Ciudadana, Hidela Benítez y Alejandro Martínez, anunció que firmaron un acuerdo que permitió poner fin a la protesta.  

“Se han surgido los diálogos correspondientes para aclarar cada uno de los puntos y hemos firmado un acta para adquirir unos compromisos que nos permiten una visión de futuro”, declaró.

Juan Carlos Bastos, presidente del Sindicato de Taxistas de Norte de Santander (Astans), quien también estuvo durante el pronunciamiento, agradeció al alcalde Jairo Yáñez por las consideraciones y dijo que de manera oficial ponían fin a la protesta que paralizó la movilidad de la ciudad por alrededor de nueve horas.

“Estamos de acuerdo en estas peticiones y gracias a ustedes compañeros fue posible este pliego de peticiones. Levantamos el paro”, dijo Bastos. 

A las 2:30 de la tarde se abrió el paso total para los vehículos en todos los puntos de la ciudad donde hubo bloqueos, aunque mucho antes se había comenzado a despejar la movilidad en algunos sectores como Pinar del Río, San Mateo y la avenida Las Américas en los accesos al Aeropuerto Camilo Daza. 

¿Quién ganó?

El paro de taxistas finalizó con la mayoría de acuerdos que favorecieron las peticiones de la ‘mancha amarilla’ tras una larga jornada que, contrario a lo que aseguraban los conductores, no tuvo la asistencia esperada, aunque estratégicamente logró su objetivo: paralizar la movilidad del tránsito en toda la ciudad. 

• Los conductores lograron que se prioricen los puntos dentro del plan de seguridad “San José” para combatir el transporte ilegal.
• El secretario de Tránsito, Mayid Gene, deberá entregar un informe con la suspensión de licencias a conductores del transporte ilegal que trabajan con el empleo de plataformas tecnológicas.
• Tendrán reuniones periódicas con en el área metropolitana de Cúcuta para evaluar el estudio del nuevo pico y placa para los taxistas. La primera, por excepción, será el lunes con el alcalde Jairo Yáñez.
• Los cucuteños ganaron la oportunidad de que la Secretaría de Infraestructura intervenga la malla vial de la ciudad, priorizando el plan “tapahuecos” en las zonas más críticas, uno de los compromisos del alcalde durante la mesa con los taxistas.
• El Área Metropolitana de Cúcuta hará un estudio para evaluar si es posible disminuir el costo de la tarjeta de operaciones.
• La Policía Nacional se comprometió a controlar el ingreso de vehículos de servicio de transporte público individual de placa extrajera.
• La Alcaldía de Cúcuta informó que habrá un adicional de $210 millones para  reestablecer el servicio de grúas en la ciudad que permitirá a la Policía de Tránsito realizar inmovilizaciones, con lo que ganaron los taxistas pero también los ciudadanos por los vehículos que se ven involucrados en accidentes viales. 

¿Quién perdió?

La jornada de protesta generó agravios en la ciudadanía y en algunos sectores productivos de Cúcuta. No fueron pocos los comentarios que, a través de redes sociales, daban cuenta del inconformismo por los bloqueos que les impidió a muchas personas llegar a sus trabajos o cumplir con sus actividades cotidianas. 

• Durante nueve horas (desde las 5:00 a. m. hasta las 2:30 p. m.) fueron cerradas las principales redomas y vías de entrada y salida a la ciudad de Cúcuta.
• Los ciudadanos reportaron que los taxistas cerraron puntos que no fueron programados dentro de los doce que anunció el sindicato. La Opinión pudo constatar que así ocurrió en lugares como Boconó, barrio San Miguel y barrio 28 de Febrero.
• Los viajeros que llegaban a Cúcuta a través del Aeropuerto Camila Daza expresaron su inconformismo, debido a que tuvieron que salir del terminal aéreo caminando con su equipaje, mientras quienes tenían vuelos programados estuvieron a punto de perderlos. 
• Establecimientos comerciales del área gastronómica reportaron una caída del 90% en las ventas durante la jornada.
• Algunos cucuteños reportaron por las redes sociales que perdieron  sus citas médicas por la falta de medios para desplazarse en medio de la protesta.
• Un alto porcentaje de ciudadanos en sus comentarios manifestaron no haber podido llegar a sus lugares de trabajo.
• Algunas instituciones educativas públicas entraron en flexibilidad académica, suspendiendo su jornada de clases o bien permitiendo que las actividades se cumplieran de manera virtual. 
• La Asociación de Empresas de Transporte del Área Metropolitana de Cúcuta (Asoempresas) manifestó no estar de acuerdo con que se vulneraran los derechos a la libre circulación.
• La Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) en Norte de Santander, la Asociación Colombiana de la Industria Gastronómica (Acodres) y la Cámara de Comercio de Cúcuta, expresaron su preocupación por el perjuicio de una jornada de paro en la dinámica del comercio de la ciudad. 
• En algunos puntos de bloqueo como el puente Atanasio Girardot y Pinar de Río hubo alteraciones del orden público.

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