Solucionar el tema del Cúcuta Deportivo se ha convertido en una premura para el Ministerio del Deporte y la Superintendencia de Sociedades.
Tras la reunión del viernes entre el ministro Guillermo Herrera y el superintendente Billy Escobar, ya se han adelantado acciones en procura de agilizar un ingreso del cuadro rojinegro al profesionalismo.
La primera de ellas y que surgió efecto horas después de dicho encuentro fue el levantamiento del embargo que la Supersociedades tenía sobre la ficha del Cúcuta ante la Dimayor.
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Este paso fue sugerido por Herrera como requisito para activar el reconocimiento deportivo, ‘licencia’ que sirve para que el conjunto fronterizo pueda actuar como un equipo profesional.
Esa inactividad fue originada, en parte, por la suspensión -en octubre de 2020- del reconocimiento debido a incumplimientos laborales que se presentaron entre diciembre de 2018 y agosto de 2019.
Los incumplimientos de ese periodo de tiempo ascendieron a una cifra de 106 millones de pesos a un grueso de 64 empleados, a quienes ya se les cumplió gracias a un aporte dado por la fundación Amigos del Cúcuta Deportivo, presidida por Jorge Luis Pinto.
Bajo la figura de depósito judicial fueron canceladas estas acreencias y a finales de julio de 2021, el Ministerio levantó la sanción, pero surgió un nuevo problema.
Los reconocimientos son otorgados por cinco años y el del Cúcuta Deportivo venció en marzo de 2021.
Este lunes, se conoció que Herrera sostuvo una reunión con el nuevo liquidador Rodrigo Tamayo.
