Calles, quebrándose
Han pasado ya 16 años desde que los vecinos de Bogotá lograron que la Alcaldía invirtiera presupuesto en la pavimentación de sus calles, pero desde entonces no se han intervenido en mantenimiento ni obras de mejora.
El tiempo y el deterioro están pasando factura. Las vías, que con tanto trabajo se consiguieron, pierden funcionalidad, mientras que otras han vuelto a su añejo estado inicial: herradura.
“Aquí pasan carros de carga pesada, como Bavaria, Postobón, de cemento, entre otros, que se dirigen a La Libertad y Bellavista, somos un barrio movido que ya necesita intervención en vías, es lo que nos tiene más angustiados”, manifestó Sajonero.
La avenida 2 entre calles 5 y 6, y la avenida 0A entre 8 y 9 son las más críticas. El líder comunal extendió la invitación a que los funcionarios se pongan la mano en el corazón y salgan de sus despachos a visitar los barrios.
Ruta de transporte
Antes de los años 2000, los vecinos debían desplazarse hacia avenidas lejanas para conseguir bus, pero desde que la misma comunidad logró gestionar una para el barrio, ahora cada 10 minutos gozan de transporte que entra y sale.
“Es muy larga, eso sí, recorre desde aquí hasta La Modelo, pasa por la 8, la 15, la 13, San Mateo, San Luis, Torcoroma y finalmente llega al barrio, pero es la única que tenemos y apreciamos el servicio”, comentó una vecina.