La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Columnistas
¿Presidente? o ¿Ubú rey?
Ubú Rey, la más satírica pieza de teatro a las mentiras del poder de la edad moderna, aparentemente un mundo distante del Estado contemporáneo.
Miércoles, 27 de Enero de 2016

Los estudiantes universitarios aportamos mucho en la creación del festival Latinoamericano de Teatro Universitario de Manizales, que va en la jornada 38 desde 1968 y que vino a ser nuestro aporte al cambio libertario que tuvo la humanidad en los fabulosos años 60s, que aún permanece. Luego empezamos el aburguesamiento.

Tuve la suerte de hacer parte del inaugural, pues el TUC – Teatro Universidad de Caldas – atendía a cada grupo participante y con tres integrantes más, lo hicimos con los argentinos. El grupo de la Universidad de Córdoba concursó con la obra del surrealista francés Alfred Jarry: Ubú Rey.

Sergio Vodanovic el dramaturgo chileno, cuando fue invitado, no podía creer en su realización cuando conoció el primer programa y dijo. “Los manizaleños son locos, fundaron una ciudad prendida de un abismo y luego hicieron el Teatro más moderno y completo de América Latina. Ahora crearon un festival con una parrilla escénica que ya quisiera una sala teatral europea”, con jurados de la talla de Pablo Neruda, Miguel Ángel Asturias, Ernesto Sábato, Mario Vargas Llosa, Jerzy Grotowsky y Jak Lang.

Ubú Rey, la más satírica pieza de teatro a las mentiras del poder de la edad moderna, aparentemente un mundo distante del Estado contemporáneo.

Pieza que parodia a Macbeth. Antonio Tullían uno de los prologuistas de la última edición de Longseller, dice que es la figura del hombre que se toma todos los poderes, con ordinariez o con finuras, con disfraz o desnudo, arrasando toda libertad. Como los dictadores de todos los siglos. Aplicable al poder político, al económico de los hombres de finanzas que juegan a los dados con el destino del hombre como afirmaba Einstein.

Padre Ubú, que proclamado Rey, gasta y malgasta, impone contribuciones excesivas, quita y pone magistrados, hace alianzas con el mal para conservar el poder, concede al pueblo dádivas para evitar disturbios, crea su propia injusticia, hasta que nace el descontento y le deponen. Huye víctima de su invento y en el refugio solo se le ocurre rezar el padrenuestro, mientras sus beneficiados conmilitones del destierro se pelean con un oso.

En la obra queda retratada la ambición, la codicia, la maldad y la astucia.

Jarry, realmente lanza un insulto a la sociedad cómplice e insolidaria. Porque al final, cuando confisca los bienes a los nobles y a los ricos, es rastrero, y todos víctimas como él mismo, de su poder. Todos tan estúpidos como su tirano, que les ha dado la prebenda.

Ah, y el pueblo más estúpido y despreciable: obedece y aplaude por temor, por ignorancia o por costumbre.


Adenda:
El péndulo se corrió bruscamente. Ahora los jueces penales producen fallos constitucionales. De ahí tanto error y tropelía. Las instancias son la única garantía.

Temas del Día