Como dijo el campesino del Zumbador, en Gramalote, no conozco “personalmente en persona” al señor gerente de Aguas Kpital, pero tengo muy buenas referencias personales por sus aficiones humanísticas y hasta identidades en los hobbies de trabajo al ritmo de Tchaikovski y Vivaldi y la música barroca. Además, gerencia una empresa de capital cucuteño que vale la pena proteger, eso sí, ajustándola a derecho y ensamblándola al rigorismo del contrato 030, firmado con la EIS-CÚCUTA SA. ESP, a veces salido de madre.
Por ello leí con extrañeza dos columnas suyas, una del 19 y otra del 24 de octubre que pasó. Se me hizo extraño, pues toma parte en el debate del embeleco pirata del acueducto metropolitano del CONPES 3798 en el que no se debe inmiscuir, pues es representante legal de la firma que gerencia, que está limitada y atada al más importante contrato municipal que está a mitad de camino y está obligado a honrar.
Además, porque el acueducto metropolitano ya existe, es propiedad del Municipio de Cúcuta representado legalmente por su Alcalde. Contrato que debe releer todos los días y que le revela en las consideraciones y en la cláusula 1ª que la prestación del servicio de venta de Agua en Bloque a V/Rosario debe continuar, respetando el acuerdo con la EIS y aprender el parágrafo 2º que le autoriza con previo acuerdo con la EIS a prestar el servicio de Agua Potable al Área Metropolitana de Cúcuta, a otros municipios vecinos y a las Zonas de Frontera.
Como ve, el acueducto metropolitano de Cúcuta ya existe y se le entregó a la empresa que gerencia, para la operación y mantenimiento desde el 2006. Al humanista gerente, bien vale recordarle la admonición de Don Quijote: “Al buen callar llaman Sancho”, su escudero. Así que la vocería dentro del debate del embeleco CONPES 3798 es única y exclusiva del nuevo alcalde doctor César Omar Rojas Ayala, que seguramente dialogará con el gobernador reelecto y por competencia constitucional decidirá.
El Contrato 030 de 2006 que debe leerse cotidianamente para evitar despropósitos, le advierte a Aguas Kpital en el Objeto, sobre la propiedad municipal lo siguiente: “Es entendido, en todo caso, que la propiedad de la infraestructura de los Servicios Públicos de Acueducto y Alcantarillado de la ciudad de San José de Cúcuta es de la EIS, como lo serán los inmuebles y obras que en desarrollo del contrato adquiera o construya el operador”. Y sobre la propiedad o derecho de dominio, el único que dispone es el Alcalde Municipal y a través de su Gerente en la EIS-CÚCUTA. SA. ESP.
Andar ofreciendo los derechos derivados de dominio del municipio de Cúcuta al gobernador saliente y a su empresa pirata, es un desaguisado jurídico, perjudicial para los intereses de Aguas Kpital ¿o no? Sea prudente, gerente humanista. No espere reacciones similares a las del Rey Juan Carlos de España, que en noviembre de 2007, justamente hace 8 años, puso de moda una frase: “¿Por qué no te callas?”.
Ahora, la circunstancia que “queramos mucho” a Aguas Kpital por ser cucuteña y eficiente, no significa que los usuarios avalemos todas sus prácticas, pues hay algunas malas. Significa que la empresa debe ajustarse a la Constitución y a la Ley, al texto del contrato 030 de 2006 y a revisar lo que les sea contrario, incluido el régimen tarifario “disfrazado”. La Ley 142 de Servicios Públicos Domiciliarios es muy clara en el Artículo 94 y en todo el capítulo II pertinente.
En otros términos, no se permitirán alzas disfrazadas destinadas a recuperar pérdidas patrimoniales o contables, mucho menos a aumentar las utilidades. Privatizar ganancias o utilidades, con entidades paralelas, es una forma abusiva de pisotear a los usuarios cucuteños y eso hay que revisarlo, dialogando, con serenidad sin causar traumatismos y evitamos colapsos. Respetar las competencias que la Constitución le asigna exclusivamente a los Municipios en el Art. 365 y a su representante legal, el señor alcalde de Cúcuta, sin entrometimientos. Gerente trabajando serenamente al ritmo de Vivaldi, de Tchaikovski y los barrocos.
Adenda: Imagínense al Partido Conservador con el regreso de todos los excluidos por la soberbia del dueño: ¿Edgar de Jesús, William y su kínder Garden, nosotros los dinosaurios de Mario, los dos Juan Carlos, los 3 correlones y el inefable Ciro? Claro que se puede, pues estamos en pleno proceso de Paz con perdón y olvido.
