Conscientes de haber enfrentado un año tan complejo como el que acaba de concluir, a partir de lo alcanzado, ya sabemos que en el 2021 lograremos que las acciones de la Paz con Legalidad para mejorar las condiciones de vida en Colombia, sean irreversibles.
Cumplimos las directrices del presidente Iván Duque para que cada uno de los frentes de la implementación, a través de, en nuestro caso la política de Paz con Legalidad, cuenten con una manifestación política indiscutible, se cimienten en una planeación a largo plazo y obtengamos resultados que nos lleven a un punto de irreversibilidad. Lo hemos logrado en todos los frentes de atención a las víctimas de la violencia, la reincorporación de excombatientes, los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), la sustitución de cultivos ilícitos, y una visión amplia sobre el desarrollo rural integral.
Comenzamos el año con la buena noticia de haber prorrogado la “Ley de víctimas y restitución de tierras” por 10 años más, una dinámica en reparaciones colectivas que logró pasar de 2 en toda la historia de la norma a 17 en estos cerca de 30 meses de gobierno, un presupuesto para reparaciones individuales para 2021 de un billón de pesos y un ritmo constante y acelerado en restitución de tierras.
En lo que hace a la reincorporación, el proceso de Colombia es considerado el más garantista del mundo: hemos ido más allá del Acuerdo y mantenemos las asignaciones básicas, las garantías económicas, salud, educación y programas de vivienda. Con mecanismos legales, recursos y una hoja de ruta concertada, trabajamos para que 13.144 excombatientes y sus familias se vinculen plenamente a la sociedad. Hoy, 2.054 personas en reincorporación están en ruta de acceso a vivienda. Hemos aprobado 2.046 proyectos entre colectivos e individuales por $58.246 millones para 5.741 personas en reincorporación. Fortalecemos y aumentamos las medidas de protección para los excombatientes, atacados por las narco disidencias, y el propósito es que la cifra de homicidios sea cero.
Los PDET, que son el motor de la transformación rural y cubren la tercera parte del territorio nacional en 16 subregiones, habitadas por 6.6 millones de personas que han sufrido con más rigor la violencia y la pobreza, representan la solución de largo plazo a problemas que debieron resolverse hace décadas. La Inversión total PDET durante lo que va corrido de este Gobierno es de $4,9 billones. A esto se suman $2.1 billones del adelanto de las regalías que aprobó el congreso el año pasado.
En la sustitución de cultivos, pese a las dificultades de planeación y financiación que había en 2018, se mantiene la atención a las cerca de 100 mil familias, unos 400 mil colombianos que están hoy en actividades lícitas, con inversiones en 2020 por más de $890 mil millones. Promovemos fórmulas adicionales de sustitución como “Formalizar para Sustituir”, “Pago por Servicios Ambientales” y “Hecho a la Medida”.
Con el programa de Colombia Rural de vías terciarias, Agua al Campo, Electrificación Rural, Salud Rural, el presupuesto de inversión para educación rural más grande la historia del país logrado antes, y el ICBF llegando a dónde no lo había logrado, las emisoras de la Paz funcionando, las regiones en vía de lograr su conectividad, el proyecto del ley de especialidad agraria en el Congreso, Coseche y Venda a la Fija con más de 130 mil productores vinculados.
Estamos en el mejor momento de la relación y el apoyo de la comunidad internacional y en este escenario, se fortalece el optimismo para saber que lo que avancemos en 2021 y lo que hagan los 2 gobiernos siguientes será irreversible para el beneficio de todos los colombianos.
*Consejero Presidencial para la Estabilización y la Consolidación
