La Avenida 4ª de la ciudad, ha sido una de las principales arterias urbanas, catalogada dentro de los planes de ordenamiento como una vía principal. 

Sin embargo, la misma colapsa frecuentemente debido al grueso número de vehículos informales que se estacionan sobre dicha vía, entre las calles 8 y 9, limitando la movilidad en el sector.

A pesar de que existen señales reglamentarias SR-40 (Prohibido estacionar), pareciera que varios conductores la interpretan al contrario y de ahí su irregular condición.

El mal ejemplo que merece reproche e inmediato actuar de la autoridad de tránsito, se evidencia sobre la Avenida 4ª entre calles 12 y 13. Allí se estacionan a cualquier hora del día camiones identificados con la marca de una de las más grandes empresas de gaseosas y jugos del país, a cargar y descargar sus productos.

No contentos con esto, también se estacionan motocicletas con remolques a lo mismo y para completar el abuso, cargan hasta el tope carretas de dos ruedas, llamadas en algunas partes zorras. 

Estos últimos, transportan en contravía hasta siete cajas de gaseosas en botella y otras más con presentación en lata, situación que los convierte en fácil causa de accidentes de tránsito, aspecto de compleja solución, toda vez que el código de tránsito no contempla colisión entre un vehículo y una carreta.

Lo anotado, convierte a una empresa de alto respaldo de la comunidad en el ejemplo de lo que no se debe hacer y por eso los postulados de responsabilidad social y respeto ciudadano, quedan totalmente rezagados ante la situación expuesta.

La empresa en cuestión, ha estructurado parte de su operación en el céntrico lugar y por lo tanto, la autoridad de tránsito al ser permisiva, tampoco puede imponer comparendos a otros conductores que abandonan sus vehículos, existiendo varios parqueaderos alrededor. 

Aunque la ley no dispone gabelas para este tipo de situaciones, es necesario aplicar las normas existentes, sin flexibilidad ni ventaja alguna.

De igual manera, debe dar instrucciones a sus empleados para reducir el riesgo al que son expuestos a diario los operadores de las carretas, toda vez que su carga excede en dimensiones y peso, aspecto que incrementa la posibilidad de accidentabilidad, concluyendo que a la fecha, dicha empresa se constituye con ese actuar irresponsable, en la dueña de la Avenida 4ª.