Tras acabarse el año 2022, en el que la economía colombiana figuraba como la mejor de la región, con las mayores perspectivas de crecimiento económico, hoy nos encontramos en una situación preocupante.
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Según las proyecciones de crecimiento del Fondo Monetario Internacional (FMI), para la región en 2023, Suramérica crecerá 1.5% y América Latina (AL) 1.8%. Colombia apenas crecerá 1.1%, la cifra más baja. Para el FMI, Latinoamérica será la región con menor crecimiento
Esta es parte de la proyección comparativa del crecimiento económico regional para 2023.
Los pronósticos son así: Colombia creciendo 1.1%; Paraguay 4.3%; Venezuela 6.5%; Uruguay 3.6% y finalmente Bolivia 2.9%.
El Banco de la República de Colombia empeora sus proyecciones de inflación y crecimiento económico nacional. El escenario de expansión de crecimiento para 2023 y 2024 es de 0.22% y 1% respectivamente. El Banco subió el pronóstico de inflación de 7.1% a 8,7%.
Entre los factores que inciden en esta irregular situación sobresalen la inflación, el elevado costo de financiación y las elevadas primas de riesgo, entre otros.
Las ventas al exterior sumaron US$57.115 millones en 2022, lo que representa un incremento del 38% al comparado con las ventas en el mismo periodo de 2021, gracias al impulso del petróleo y la minería.
Y el esperado aporte que el cese al fuego en el conflicto Rusia Ucrania, tras casi un año, pueda dar al mejoramiento económico mundial, cada día se dificulta más.
Ante la insistencia del presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, y las autoridades militares de ese país, sobre el envío de aviones, Estados Unidos y algunos de sus socios temen que esto conduzca a una peligrosa escalada del conflicto con Rusia, que cuenta con un amplio arsenal de armas nucleares. Además de su capacidad para eludir sanciones.
Aquí no queda otro camino que esperar.
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