Las ciudades se desarrollan cumpliendo o no la ley, toda vez que cada día vemos irregularidades relacionadas con licencias de construcción, violación a los Planes de Ordenamiento Territorial (POT) e indiferencia de la autoridad municipal cuando se trata de controles.

En esta oportunidad, me voy a referir a la construcción del Conjunto Cerrado Arándanos 2, ubicada en la margen derecha dirección oriente- occidente de la Variante La Floresta, vía huérfana para unas cosas y con paternidad para otras. 

La citada vía une el punto de referencia Pinar del Río con el Anillo Vial Oriental. Por muchos años estuvo abandonada y tan solo en la administración del elegido Senador Edgar Díaz, se instaló carpeta asfáltica en un tramo y la parte faltante, requiere su atención inmediata. 

La historia de su construcción data desde la época que existió el extinto Distrito de Obras Públicas N°16, entidad del orden nacional que fue reemplazada por el Invías. 

Por esta razón, las administraciones municipales de Los Patios, Villa Rosario y Cúcuta, son indiferentes para aliviar o resolver la problemática de esta importante arteria vial.

Para saber a quién le corresponde atender esta parte de infraestructura, basta con revisar el recibo del impuesto predial, puesto que no es lógico ni justo, que se cobre un valor y se ignore la responsabilidad que les asiste para atender el mantenimiento vial y además, se utilice para que los funcionarios de la Dirección de Tránsito de Los Patios, instalen sus trampas disfrazadas de operativos, mientras tanto al interior de sus calles, sucede de todo, por ejemplo el accidente en el cual resultaron 17 personas heridas.  

Volviendo al caso de Arándanos 2 en construcción, los responsables de la obra se han tomado un carril completo de la vía para descargar materiales de construcción, situación que ofrece alto riesgo para los conductores que la transitan, principalmente en horas nocturnas.

El atropello de la constructora es muy evidente y lamentable, puesto que no utilizan los espacios propios sino los públicos y el asunto se repite no solo en Los Patios sino en Cúcuta. 

En plena Avenida 1E con Calle 13, donde se adelanta una obra, los contratistas han decidido apoderarse  del andén y un carril, situación algo más grave puesto que el flujo automotor es superior y en consecuencia la accidentalidad tiene sus puertas abiertas. 

Los Secretarios de Planeación, tienen la obligación de velar porque las obras se ejecuten dentro de los parámetros que contemplan la protección del espacio público y aún más cuando comprometen la movilidad. Los constructores, deben ser respetuosos de la normatividad y entender que las licencias de construcción que les aprueban, no contemplan violación del espacio que le corresponde tanto a vehículos como a peatones.