Las ferias del libro son encuentros excepcionales que nos dan la oportunidad de conocer o recordar algunos episodios que habíamos olvidado. En esta oportunidad el país invitado en la Feria Internacional de Bogotá es México, y en el pabellón dedicado a ese país tuve oportunidad de escuchar un conversatorio sobre la vida de un artista mexicano, quien entendió el 20 de noviembre de 1910 cuando estalló la primera revolución del siglo XX en el mundo, movimiento que no ocurrió en Europa sino en América, y el pintor de paisajes Gerardo Murillo decide bajarse de ese mundo de marfil en el que frecuentemente se refugian los intelectuales y decide actuar. Ocurría que en México había un dictador durante más de 30 años, Porfirio Díaz, quien había decidido postularse nuevamente a la presidencia provocando un gran rechazo político. Esta decisión da lugar a una protesta contra el dictador, y el artista que tenía un seudónimo muy singular, el Dr Atl, decide participar en la revolución y con sus propias manos mata a otro dictador, a Huerta. El artista después de haber participado y triunfar en la protesta, vuelve a su mundo de pintor.  

En otro pabellón, el homenaje fue a uno de los escritores mexicanos de mayor influencia, Carlos Fuentes, quien hizo parte en los años 70 con García Márquez, Vargas Llosa y Cortázar del Boom Latinoamericano; Uno de sus mejores aportes de Fuentes a la literatura fue ‘La muerte de Artemio Cruz’, las reflexiones de un empresario que en algún momento apoyó la revolución, combatió y luchó, pero en sus últimos años se había convertido en un millonario corrupto. Otro capítulo especial en la historia de México lo constituyó el movimiento artístico ‘El Muralismo’, que durante los años 20, después del triunfo de la revolución, trató a través del arte de consolidar ese triunfo. Diego Rivera, Gerardo Murillo, Frida Kalo. Y un poco más allá, en otro stand, un libro que hay que buscarlo, no alcancé a escuchar el conversatorio ‘El mataviejitas’, una historia cierta de un asesino en ciudad de México cuya perversión era esa, matar viejitas. De todo es posible encontrar en una feria.

El stand del Norte de Santander está en el segundo piso del pabellón 6, que durante el desarrollo de la feria estuvo bajo la coordinación del periodista Isaías Romero, hijo de Ángel, el periodista de la Opinión recientemente fallecido y conocido a nivel nacional por haber dado en abril de 1983 la noticia de la muerte de Jaime Báteman en un accidente aéreo.  Como era de esperarse un buen aporte a la región, al periodismo, la presentación del libro del Maestro Cicerón Flórez ‘Se hace camino al andar’. Cuando tengamos la oportunidad de tenerlo en las manos y leerlo, seguramente tendremos un recorrido de la mano del experimentado periodista de muchas crónicas y episodios de la región, libro en el que además narra la vida de algunos de los protagonistas más importantes del departamento en los últimos años como la vida de Eustorgio Colmenares Baptista. Uno de los libros que me llamó la atención, un relato con dibujos de lo que fue la vida de Camilo Daza, y vi algo de un poeta que deberíamos estudiar más, Jorge Gaitán Durán.

Tuve ocasión de participar en un conversatorio con el representante a la cámara por Bogotá por el Pacto Histórico, Heráclito Landínez. Hablar sobre la realidad de la frontera después de su reapertura hace 7 meses, que sin duda ha sido un gran acierto del presidente Petro después de esos siete años nefastos que nos dejó el cierre, es hablar de expectativas y posibilidades para la frontera. En los mejores años de comercio entre Colombia y Venezuela llegamos a tener unos niveles de comercio cercanos a 8 mil millones de dólares, que quedaron en punto 0. En fin, como siempre, un gran espacio las ferias del libro.

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