El Gobierno del presidente Gustavo Petro ha enfocado sus esfuerzos en este primer mes en la apertura de la frontera entre Colombia y Venezuela, un hecho que será realidad este lunes 26 de septiembre, a las 10:00 de la mañana, cuando el transporte de carga vuelva a cruzar los puentes Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander.

Uno de los funcionarios que ha estado al frente de esta apertura es el ministro de Comercio, Industria y Turismo, Germán Umaña, quien junto a sus pares de otras carteras ha estado liderando el trabajo logístico con aduanas, recuperación de puentes y todo lo que tiene que ver con seguridad para el paso del transporte de mercancías.

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En diálogo con COLPRENSA, el funcionario explicó que ya se dio el paso más importante, pero que el reto será lograr consolidar esa apertura en el corto, mediano y largo plazo, para volver a consolidar este paso fronterizo como uno de los más importantes para el comercio binacional por donde se movía casi el 60% de este.

- Ya completa un mes largo al frente del Ministerio. ¿Qué balance puede hacer hasta el momento de lo que se ha venido trabajando desde la cartera?

Han sido unos primeros días apasionantes, no solo apasionantes sino con resultados y el principal de ellos, que lo habíamos anunciado desde el programa de empalme, es la apertura de la frontera entre Colombia y Venezuela. El trabajo que hemos realizado tiene que ver fundamentalmente con tres cosas: una reorganización en el tema de promoción del turismo verde; en segundo lugar los temas de comercio exterior; y en la industria rápidamente hemos podido avanzar, gracias a un equipo de trabajo formidable que hay en el Ministerio, en la formulación y desarrollo de una política industrial.

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- Sin duda, ministro, el tema de la apertura de la frontera con Venezuela este lunes es uno de los temas que más ocupa la atención del país. ¿Cómo se está construyendo esa relación económica entre los dos países?

Gracias a un trabajo de colaboración entre Colombia y Venezuela del más alto nivel, con el liderazgo de los presidentes Gustavo Petro y Nicolás Maduro, se dieron las instrucciones a todos los ministros para esa apertura. Como comercio exterior tenemos claro que nuestro trabajo es facilitar todos los temas de apertura de la frontera y, para el 26 de septiembre, nosotros con el Ministerio de Transporte, la Cancillería y todas las entidades adscritas, hemos hecho todo el trabajo logístico, con aduanas, con infraestructura, con todo lo que tiene que ver con tener la mayor seguridad para el paso del transporte de mercancías en frontera.

Desde el punto de vista del sector comercio y transporte hemos realizado todo lo necesario para que esto salga muy bien, ahora se trata de profundizar en todo lo que son las relaciones comerciales de inversión, complementación industrial y productiva; y ya con la vicepresidenta Delcy Rodríguez, que es la jefe del sector económico en Venezuela, hemos acordado importantes reuniones con todos los ministros del área económica, para perfeccionar, en el marco de los acuerdos internacionales y en el marco de la seguridad jurídica y de la institucionalidad, el desarrollo posterior. Estamos ante un gran reto, ya logramos la apertura y ahora lo que tenemos que lograr es la consolidación.

-. ¿Cómo va a ser esta apertura? ¿A partir del lunes empezará a darse el paso por los puentes fronterizos de los camiones con mercancía de un país al otro?

Sí señor, lógicamente que eso necesitará hacia el futuro una adecuación, porque son siete años intermitentes o permanentes del cierre de la frontera, pero ya toda la logística aduanera y la logística en materia de transporte está determinada. Desde el 26 tendremos el paso de tractomulas en los dos sentidos en la frontera.

- ¿Qué expectativas hay frente a este restablecimiento de relaciones en cuanto al comercio? ¿Se espera que esta apertura empiece a dar frutos en el corto, mediano o largo plazo?

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Tal vez lo más importante es la recuperación de los indicadores sociales en la frontera, es decir, esa brecha que se había formado entre la Nación y las regiones, tanto en Colombia como en Venezuela, desde el punto de vista del empleo, de la formalidad, desde el ingreso per cápita, de todo lo que tiene que ver con la recuperación de indicadores de pobreza, que con la apertura van a empezar a cerrarse.

En segundo lugar, lo que se va a ver en la frontera es una complementación productiva, industrial, de servicios de inversiones, que eso va a ser virtuoso para la recuperación de la frontera de Norte de Santander. Además de este tema que se vuelve fundamental, se va a producir un crecimiento en el comercio binacional legal, que para este año podemos pensar entre 800.000 y 1.000 millones de dólares, muy lejano de los 7.800 millones del 2008, pero en general somos muy positivos de ese crecimiento del comercio. Posiblemente el próximo año lleguemos a los 2.000 millones y ya se da un proceso paulatino de recuperación de todos los temas sociales, el fortalecimiento de la frontera.

- ¿Qué le han dicho los empresarios de la región? ¿Hay optimismo por esa apertura de la frontera después de tanto tiempo cerrada?

El optimismo es realmente importante, pero hay que ser prudentes en el optimismo para una recuperación paulatina. No solo los empresarios de la frontera, sino los empresarios de los dos países que han tenido en el pasado un comercio tan dinámico están optimistas y cautelosos sobre esta recuperación, porque saben que necesitan volver a construir una relación cada vez más fluida. Pero lo que es indudable es que Venezuela y Colombia, que son dos países que nunca han debido de estar cerrados en sus fronteras, tiene una oportunidad maravillosa de desarrollo hacia el futuro. Estamos logrando la apertura de la frontera más importante entre Colombia y Venezuela. Por allí pasaba cerca del 60 % del flujo de mercancías.

- Esta apertura también trae algunas preguntas sobre las deudas que había en el pasado con los empresarios colombianos. ¿Cómo está ese tema?

El primer tema en este momento es que hay un flujo importante en materia cambiaria dentro de las normas de los dos países, que son una liberalización del control de cambios. Están pagando por anticipado y se está exportando, se está cuidando mucho de proteger a nuestros empresarios y a los venezolanos de cualquier tema de sanciones y, en general, en este momento está fluyendo sin ninguna dificultad las mercancías y los pagos de las mercancías. Sobre el pasado, pues queda una parte pequeña de deudas de los empresarios venezolanos con los empresarios colombianos, pero estamos haciendo un trabajo importante, pues estamos construyendo una nueva relación con una transparencia en materia cambiaria y de pagos.

- El tema del contrabando es otra de las grandes preocupaciones de esta frontera. ¿Qué se está trabajando específicamente en este sentido?

En la medida que se abra la frontera legalmente, institucionalmente y con seguridad jurídica, pues el efecto inmediato es que bajan todo este tipo de prácticas, que no son las más adecuadas, tanto desde el punto de vista de contrabando en todos los casos. Lo que estamos acordando con Venezuela es esa importancia de restituir la institucionalidad y controlar de acuerdo con las normas sanitarias, fitosanitarias y aduaneras, todo lo que significa esto. Es lógico que lo legal sustituye lo ilegal en la medida en que se abre la frontera, por lo que estas prácticas van a disminuir.

- Además del Comercio exterior, también se abre una gran posibilidad con el turismo. ¿Qué se está trabajando allí?

Lo básico es que estamos trabajando en un turismo sostenible, en un turismo verde, en un turismo respetuoso con la naturaleza, con las comunidades, con nuestros bienes culturales y demás, y de hecho ya tenemos en la frontera a los funcionarios del sector para acordar una hoja de ruta y profundizar todas esas relaciones en materia de turismo. Se están preparando las condiciones para hacer un turismo que corresponda al objeto del programa de Gobierno del presidente Gustavo Petro.

- ¿Y la apertura de vuelos entre los dos países?

El tema del transporte aéreo se está recuperando, ya va a haber un primer vuelo de confianza el 26 de septiembre; después ya Wingo tiene las autorizaciones para las rutas de Valencia y Caracas, que se reiniciarán el 4 de octubre, y poco a poco irá normalizándose todo ese flujo. Ya Avianca ha hechos las solicitudes respectivas, Latam también, porque todo esto va a ser muy importante para el flujo de personas y empresarios entre los dos países.

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