Al menos 43.664 niños han sido dados en adopción en los últimos 18 años, entre el ICBF y las instituciones autorizadas para desarrollar programas de adopción en Colombia.

La habitación quedó adornada. El clóset lleno de ropa. Los juguetes quedaron tendidos sobre la cuna y el paso por la habitación se convirtió en el espacio de la casa en donde el dolor y el desconsuelo invadían a la familia Duarte Ojeda.

Las complicaciones en el embarazo impidieron la llegada del primer hijo a este hogar. Durante 5 años, la pareja de esposos intentó tener un hijo sin éxito. Las ayudas médicas y las prácticas de creencias populares se convirtieron en el común denominador de su diario vivir.

Aunque desde un principio no contemplaron la opción de adoptar a un niño, la falta de garantías para tener un bebé hizo cambiar de opinión a esta pareja, que veía cómo cada uno llegaba a los 30 años, y se quedaba sin la posibilidad de experimentar la crianza de un hijo.

Decidieron buscar ayuda y adoptaron a una niña de 2 años, quien reflejó todos los sentimientos y las aspiraciones que los esposos buscaban y añoraban desde que se casaron, en una tarde de diciembre.

Confiesan que los primeros dos meses hubo sentimientos encontrados entre alegría, incertidumbre y zozobra, mientras lograban afianzar las relaciones afectivas con la nueva inquilina de la casa.

Comprar ropa, juguetes y volverse complacientes hasta el extremo, fueron las primeras tareas que cumplieron los padres con su hija, quien llegó al hogar a complementar la felicidad a medias que vivían los esposos.

“Ella es mi hija. Me ha hecho amarla como si la hubiera tenido en mi vientre”, comenta la mamá, mientras acaricia el rostro de la menor, con un gesto de felicidad.

Aunque la pequeña sufre de una enfermedad mental, esta ha hecho que sus padres adoptivos se esfuercen cada día por sacarla adelante y así logre superarla.

Aseguran que el trato es más especial por su condición pero que ni siquiera eso les hará desfallecer en la nueva vida que formaron con ella.

Planean las próximas vacaciones y ya tienen decidido ir al mar para disfrutar de la playa en un ambiente familiar.
“
Serán las mejores vacaciones que podamos tener”, dice el papá.

Le auguran prosperidad a su hija y quieren siempre estar a su lado para apoyarla en las decisiones que ella tome.

Según las estadísticas del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), en 2014 fueron adoptados 1.148 niños: 584 fueron adopciones de familias colombianas, mientras que 564 lo hicieron familias extranjeras.

Hasta el 31 de marzo de 2015, 203 menores de edad fueron adoptados. Las familias extranjeras lideran el ranking con 105 niños, mientras que las colombianas adoptaron a 98 menores.

Además, en el periodo comprendido entre 1997 y lo que va de 2015, el 2007 fue el año en que más se adoptaron niños con 3.077, seguido de 2010 con 3.058 y 1998 con 2.929 niños adoptados en Colombia.

Así las cosas, 43.664 niños han sido adoptados en los últimos 18 años, entre el ICBF y las instituciones autorizadas.

Lo que debe saber

La norma colombiana establece en el código de Infancia y Adolescencia, artículo 74, que ni el ICBF ni las instituciones autorizadas para desarrollar programas de adopción podrán cobrar directa o indirectamente por la entrega de un menor.

Agrega que se debe contemplar la adopción como el establecimiento de una verdadera familia, como la que existe entre miembros unidos por lazos de sangre, con derechos y deberes que implican que el adoptante está obligado a asistir y a cuidar del hijo adoptivo.

Para poder adoptar se debe tener más de 25 años, demostrar la idoneidad física, mental, moral y social para ofrecer una familia estable a un menor de 18 años, y tener al menos 15 años más que el niño.

El proceso de adopción se divide en dos etapas: una es administrativa en la que el ICBF declara adoptable al niño; la otra es judicial, en la que la adopción se declara a través de sentencia en los juzgados de familia.

Los esposos, las personas solteras, viudas o separadas, la pareja formada por un hombre y una mujer que demuestre convivencia ininterrumpida de por lo menos dos años o cónyuges, pueden adoptar.

En Colombia se puede adoptar a niños menores de 18 años con declaratoria de adoptabilidad; los niños cuya adopción haya sido contemplada previamente por sus padres, o los niños cuya adopción haya autorizado el defensor de familia del ICBF.

También se puede adoptar al hijo de uno de los cónyuges. La ley establece que si el adoptante ha cuidado de él y han convivido bajo el mismo techo, por lo menos dos años antes de que cumpliera los 18 años, puede hacerlo.

El trámite

La coordinación administrativa del trámite corresponde a la subdirección de Adopciones del ICBF.

El proceso lo resuelve conjuntamente esta oficina con las sedes regionales del instituto y con las instituciones autorizadas por el ICBF para desarrollar los programas de adopción.

Las solicitudes de adopción son atendidas para su estudio y análisis en estricto orden cronológico de llegada.

Además, tienen prioridad las solicitudes de familias colombianas residentes en el país y en el exterior.