Colombia in My Arms (Colombia fue nuestra), el documental finlandés sobre la desigualdad social y el intento de alcanzar la paz en Colombia, ahora podrá ser visto en las pantallas de los hogares colombianos a través de los principales servicios digitales de streaming: Mowies, Amazon Prime, Apple TV, Vimeo y Google Play. Dirigido por los cineastas Jenni Kivistö y Jussi Rastas, la cinta es una coproducción entre Dinamarca, Noruega y Francia.
Aclamada en Europa, ahora en las pantallas de los hogares en Colombia
Colombia in My Arms ha recibido 13 premios en festivales internacionales de cine, incluyendo el Premio Dragón al Mejor Documental 2020 (GFF / Suecia) y el Búho de Oro al Mejor Largometraje 2020 (FICBC / Brasil). También ha sido seleccionado en festivales de gran importancia, como MOSTRA Internacional de Cine de São Paulo y el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana.
Este relato polifónico a través de las voces de cuatro colombianos que parecieran vivir cada uno en una versión distinta del mismo país, cobra relevancia este 2021, en medio del estallido social colombiano, al abordar aspectos íntimamente relacionados con el conflicto como la desigualdad, la concentración de poder y la distancia entre múltiples realidades del país.
Cuatro miradas muy diferentes de una sola Colombia
Ernesto, un reinsertado guerrillero que aspira cambiar su fusil por la palabra, sueña con un país que ofrezca oportunidades para los estratos más vulnerables. Cerca de él, por el Río Mira en Tumaco, los campesinos cocaleros preferirían dejar de sembrar “la planta ilegal” si se les cumpliera lo prometido en el acuerdo de paz. Por otro lado, una apasionada congresista de derecha y un aristócrata desean rescatar al país de un acuerdo que consideran desfavorable. Todos tras el anhelo de vivir en un entorno mejor.
La producción
Los documentalistas finlandeses Jenni Kivistö y Jussi Rastas, quienes han vivido desde 2005 entre Finlandia y Sudamérica, coincidieron en 2016 con un hecho histórico trascendental: la firma del acuerdo de paz en Colombia luego de décadas de conflicto.
Filmada durante año y medio, entre 2017 y 2018, en medio del proceso de paz, lograron vivir cinco meses con la guerrilla de las Farc y los campesinos cocaleros en Tumaco. La otra mitad de la producción fue grabada en la capital, Bogotá y sus alrededores. Aunque en principio el documental fue pensado como una bella compilación de reflexiones sobre la paz, muy pronto el acontecer diario confrontó a los cineastas con una realidad muy diferente a la que habían pensado.
Fueron sorprendidos por la valentía y la sinceridad de los protagonistas del documental, quienes no tuvieron problema en exponer sus vidas y puntos de vista abiertamente. De tal manera, que el espectador podrá conocer de cerca situaciones reales y condiciones humanas desde lo más íntimo de las diferentes posiciones sociales, cada uno defendiendo su propio significado de la paz.
El montaje les tomó casi un año para lograr presentar todo lo más honestamente posible, y la obra resultó ser una reflexión bastante fuerte sobre la desigualdad y el poder a través de escenas trágicas y otras cómicas, paradójicamente.
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